Un golden retriever llamado Max interrumpió un servicio dominical en la Capilla de San Agustín en Silver Creek, ladrando a una estatua recién instalada de la Virgen María, lo que provocó una gran preocupación entre los feligreses. Después del incidente, los residentes informaron de sucesos extraños, incluidos ruidos inexplicables y avistamientos de sombras alrededor de la capilla, lo que provocó discusiones sobre posibles explicaciones sobrenaturales.
La estatua de la Virgen María fue descubierta agrietada y fría al tacto poco después del disturbio, lo que hizo sonar las alarmas sobre su significado y los acontecimientos que la rodearon. Entre los escombros de la estatua destrozada, se encontró una misteriosa caja antigua, que se cree que está relacionada con los extraños sucesos en el pueblo.
Los habitantes del pueblo, encabezados por el reverendo Michael y los residentes locales, se enfrentaron a una entidad antigua que había tomado la forma de una figura local familiar, el Sr. Johnson, durante un encuentro culminante en una cripta subterránea.