**Furia total: Benjamín Vicuña quiere agarrar al abogado de Wanda Nara por lo que le hizo a su hijo**
El mundo del espectáculo ha estallado en una tormenta de indignación tras un comentario homófobo supuestamente atribuido al abogado de Wanda Nara, Guillermo Gastón López, dirigido al pequeño Amancio, hijo de Benjamín Vicuña y la China Suárez. La situación ha desatado la furia del actor chileno, quien, como padre, no está dispuesto a tolerar ninguna forma de agresión hacia su hijo.
Todo comenzó con una captura de pantalla que circuló en redes sociales, donde se hacía referencia a “rasgos de homo𝓈ℯ𝓍ualidad infantil” en relación al niño de apenas cuatro años. La China Suárez, quien recibió el mensaje, decidió hacer público el agravio, lo que provocó una ola de reacciones. Sin embargo, la verdadera explosión llegó cuando Vicuña se enteró del contenido. Según fuentes cercanas, el actor no solo se indignó, sino que contactó a su abogado, dejando entrever que estaba dispuesto a tomar acciones legales inmediatas.
“Basta de exponer a mis hijos”, habría exclamado Vicuña, visiblemente afectado por la situación. La tensión entre los protagonistas de esta historia se intensifica aún más al considerar que el conflicto también involucra a Wanda Nara, con quien la China Suárez ha tenido enfrentamientos previos. La situación ha revelado la delgada línea entre lo personal y lo mediático, donde los niños, inocentes en esta batalla, son los que más sufren.
El abogado López, por su parte, negó haber escrito el mensaje y expresó que su cuenta fue bloqueada tras denuncias masivas. Pero el daño ya estaba hecho. Desde el entorno de Vicuña se evalúan acciones legales por daño moral y discriminación, reflejando la seriedad con la que están tomando el asunto. “Lo que más le duele a Benjamín no es el escándalo, sino el impacto que esto podría tener en su hijo”, aseguran.
Mientras la veracidad del mensaje sigue bajo investigación, una cosa es clara: cuando se trata de proteger a sus hijos, Vicuña no está dispuesto a dar un paso atrás. La comunidad espera con ansias el desenlace de esta historia, que pone en el centro del debate la exposición mediática de los menores y la necesidad de poner fin a estos ataques.