Una madre sustituta ha hecho una revelación explosiva que podría desestabilizar la imagen de la realeza británica. En un video que se ha vuelto viral, esta mujer afirma ser la verdadera madre de Archie y Lilibet, los hijos de Meghan Markle, y asegura que la duquesa de Sus𝓈ℯ𝓍 nunca estuvo embarazada. Con lo que describe como “documentos irrefutables”, incluyendo contratos de gestación subrogada y testimonios presenciales, está desmantelando la narrativa pública de la maternidad real.
La mujer, cuya identidad se mantiene en secreto, expone que fue contratada para llevar a término los embarazos y que ha guardado silencio durante años bajo un acuerdo de confidencialidad. Sin embargo, la creciente atención mediática y el deseo de reconocimiento la llevaron a romper su silencio. “Quiero que algún día sepan que su nacimiento fue real”, declaró, mientras mostraba documentos que, según ella, corroboran su historia.
La reacción del palacio ha sido notablemente ausente. No ha habido desmentidos ni apoyos a Meghan y Harry, lo que ha alimentado especulaciones sobre la veracidad de las afirmaciones de la madre sustituta. Los expertos en realeza advierten que si estas acusaciones son ciertas, podrían tener consecuencias legales y constitucionales devastadoras para la monarquía, poniendo en duda la legitimidad de los títulos de Archie y Lilibet.
Las redes sociales han estallado con teorías y preguntas sobre la autenticidad de los embarazos de Meghan. La falta de registros hospitalarios, las inconsistencias en las fechas y la ausencia de fotografías en los tradicionales pasos públicos tras los partos han suscitado un mar de dudas. A medida que la presión pública aumenta, el futuro de la familia Sus𝓈ℯ𝓍 y la estabilidad de la monarquía se encuentran en un delicado equilibrio.
La historia está lejos de terminar. ¿Responderá Meghan a estas acusaciones? ¿Se someterá a pruebas de ADN? El mundo está observando, y cada movimiento de los Sus𝓈ℯ𝓍 será analizado con lupa. La verdad, sea cual sea, ya no se puede ocultar tras los muros del palacio.