**Harfuch desenmascara a Silvano: ¡El sistema de corrupción más sofisticado del Estado cae!**

En una operación sin precedentes, Omar García Harfuch, director de operaciones conjuntas con la DEA, llevó a cabo la detención de Silvano Aureoles Conejo, exgobernador de Michoacán, en un operativo que destapa la corrupción institucional más alarmante del país. La madrugada del 17 de mayo, en un cruce desértico de Texas, un Cadillac Escalade negro fue rodeado con precisión militar. Aureoles, con un pasaporte falso en mano, levantó lentamente las manos al escuchar la contundente frase: “El juego ha terminado, gobernador”.

Este arresto no es un simple caso. Es la caída de un símbolo de legalidad que, durante años, ha operado como la cara sonriente de una red internacional de lavado de dinero y vínculos con el crimen organizado. La Interpol había emitido una orden roja en su contra, y su captura marca el inicio de la Operación Aidra, diseñada para desmantelar la arquitectura financiera que lo respaldaba.

Los hallazgos son explosivos: en un registro minucioso, se encontraron dispositivos satelitales, un disco duro encriptado y una libreta con coordenadas bancarias. En menos de 72 horas, 14 órdenes de cateo fueron emitidas en varios estados, revelando un sistema de lavado que movía más de 48 millones de dólares anuales a través de criptomonedas y contratos públicos fraudulentos.

La verdadera magnitud de este escándalo se hizo evidente cuando los agentes descubrieron una mansión en Valle de Bravo, que funcionaba como un complejo de operaciones criminales. Allí, encontraron una bóveda secreta con millones en efectivo, lingotes de oro y una infraestructura diseñada para manipular información y elecciones.

Este caso trasciende la figura de un político corrupto: es un espejo de un sistema donde la complicidad institucional se ha normalizado. Mientras las redes sociales estallan con indignación, la pregunta es clara: ¿cuántos más Silvanos siguen en el poder? La ciudadanía exige respuestas y una refundación del pacto social. Este no es solo un arresto; es el inicio de una lucha por la verdad y la justicia. ¡México ha despertado!