El estudio de “LAM” se convirtió en un campo de batalla emocional cuando Marcela Feudale rompió en llanto tras un acalorado debate con Yanina Latorre sobre la condena de Cristina Fernández de Kirchner. La tensión se palpaba en el aire mientras los panelistas discutían la reciente decisión de la Corte Suprema, que sentenció a la expresidenta a seis años de prisión e inhabilitación perpetua. Feudale, visiblemente afectada, cuestionó la imparcialidad de la justicia, sugiriendo que la condena era un acto de “ensañamiento”.
Mientras el abogado Mauricio de Alesandro explicaba los detalles del fallo, Feudale interrumpió con una pregunta incisiva, generando un intercambio de opiniones que rápidamente escaló en intensidad. Las palabras volaron, pero lo más impactante ocurrió fuera del aire. Durante una pausa comercial, Feudale, con lágrimas en los ojos, acusó a Latorre de disfrutar la condena de Kirchner, lo que dejó al equipo del programa en estado de shock.
El regreso al aire fue tenso; Latorre, lejos de calmar la situación, respondió fríamente, desestimando las emociones de su compañera. La escena se volvió viral en redes sociales, desatando un torrente de reacciones que reflejaban la profunda división que atraviesa a la sociedad argentina. Comentarios de apoyo y críticas hacia ambas panelistas inundaron las plataformas digitales, revelando que este cruce iba más allá de un simple debate televisivo; era un reflejo de la grieta política que separa a millones de argentinos.
La discusión no solo evidenció las diferencias ideológicas, sino también la fragilidad de las relaciones personales en un contexto donde la política se entrelaza con la vida cotidiana. Marcela Feudale, con su emotividad, mostró una humanidad que muchos consideran necesaria en el periodismo actual, mientras que Yanina Latorre se mantuvo firme en su postura, recordando que la justicia debe prevalecer, sin importar las emociones. En un país donde el dolor y la desconfianza son moneda corriente, este episodio nos invita a reflexionar: ¿es posible el diálogo cuando el dolor se vuelve palpable?