¡ESCÁNDALO! Laura Sarabia, exministra de Relaciones Exteriores del gobierno de Gustavo Petro, ha lanzado una contundente acusación que sacude los cimientos de la administración actual. En una reveladora carta de renuncia, Sarabia no solo dejó claro su desacuerdo con el rumbo del gobierno, sino que también expuso las tensiones internas que llevaron a su salida el pasado 3 de julio.
La renuncia de Sarabia, quien fue considerada una de las figuras más cercanas a Petro, se centra en la controversia sobre la contratación de pasaportes, un tema que se convirtió en el detonante de su decisión. A pesar de haber trabajado durante meses en un plan para renovar el contrato con la empresa Thomas Greg Sons, la intervención de Alfredo Saad en el proceso debilitó su autoridad y forzó su renuncia.
En un giro inesperado, el gobierno de Petro ha tenido que aceptar la misma solución que Sarabia había propuesto desde el principio, prorrogando el contrato con Thomas Greg hasta abril del próximo año. Esto contrasta con las críticas previas del presidente hacia la empresa, lo que genera una profunda incongruencia en la administración actual.
Sarabia, tras su salida, utilizó las redes sociales para reafirmar su postura, afirmando que su estrategia garantizaba la continuidad del servicio sin interrupciones. Su mensaje ha resonado fuertemente, provocando reacciones tanto dentro como fuera del gobierno, y dejando al descubierto las fracturas en la cohesión del equipo de Petro.
Este escándalo no solo pone en entredicho la capacidad del gobierno para manejar crisis internas, sino que también plantea serias preguntas sobre la coherencia de las decisiones políticas. Mientras el ejecutivo avanza con un plan que ya ha sido criticado, el tiempo dirá si esta transición será efectiva o si se convertirá en un nuevo foco de controversia.
La situación es crítica y el futuro del gobierno de Petro pende de un hilo. ¿Podrá recuperarse de este golpe interno? La respuesta está por verse.