**Las 24 Horas Que Hicieron Temblar a Putin: Intento de Golpe de Estado en Rusia**
Rusia ha sido sacudida por una rebelión sin precedentes que amenaza la estabilidad del régimen de Vladimir Putin. Este fin de semana, Yevgeny Prigozhin, el líder del grupo mercenario Wagner y hasta ahora aliado leal del Kremlin, lanzó un insólito levantamiento contra la cúpula militar del país. En cuestión de horas, la situación escaló a niveles críticos, dejando al descubierto una crisis interna devastadora.
Prigozhin, conocido como el “chef de Putin” por su cercanía con el presidente, acusó al ejército ruso de atacar a sus hombres, lo que desató una marcha hacia Moscú con 25,000 combatientes. En una jugada audaz, Wagner tomó el control de la ciudad de Rostov del Don, una base estratégica en la guerra contra Ucrania, y se acercó a la capital rusa. La respuesta del Kremlin fue inmediata: se establecieron barricadas y se cerró la Plaza Roja mientras la ciudad se preparaba para un posible enfrentamiento.
Sin embargo, en un giro inesperado, Prigozhin decidió detener su avance, aparentemente para evitar un baño de sangre, tras negociaciones con el presidente bielorruso Alexander Lukashenko. Como resultado, se acordó que las tropas de Wagner se trasladarían a Bielorrusia y se cerrarían los cargos penales en su contra.
Este intento de golpe, aunque no consumado, ha expuesto las debilidades del régimen de Putin en un momento crítico, mientras Ucrania lanza contraofensivas en medio de la agitación en Moscú. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, aprovechó la oportunidad para resaltar la vulnerabilidad del Kremlin, sugiriendo que el caos interno podría facilitar la captura de más ciudades rusas.
La situación en Rusia es tensa y peligrosa. ¿Está Putin perdiendo el control? La respuesta a esta pregunta podría redefinir no solo el futuro de Rusia, sino también el curso de la guerra en Ucrania. La incertidumbre y el temor se ciernen sobre el Kremlin, y el mundo observa con atención.