**Claves del día: ¿Un nuevo Múnich 1938? Europa se opone al plan de Trump y Putin, y Zelensky dice NO**

La tensión geopolítica en torno a la guerra en Ucrania se intensifica a medida que se acercan las negociaciones entre Donald Trump y Vladimir Putin. En un contexto que recuerda al ominoso Múnich de 1938, Europa y el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky han dejado claro que no aceptarán el acuerdo propuesto por el Kremlin, que implica una cesión de territorios a Rusia, lo que podría sentar un precedente peligroso.

Zelensky y los líderes europeos han expresado su rechazo a cualquier acuerdo que no contemple una paz justa, enfatizando que no se puede ceder territorio a un agresor. Este posicionamiento es crucial, ya que el recuerdo de la política de apaciguamiento de Neville Chamberlain hacia Hitler resuena en las decisiones actuales. Churchill advirtió en su momento que el deshonor llevaría a la guerra, y la historia parece estar repitiéndose.

A medida que se aproxima la reunión de Alaska, donde se espera que Trump y Putin discutan un alto el fuego, la presión sobre el expresidente estadounidense crece. Los medios europeos, especialmente de izquierda, están instando a Trump a evitar la repetición de los errores del pasado. La situación es delicada, y cualquier acuerdo que no incluya a Ucrania y sus aliados podría ser visto como una imposición inaceptable.

Mientras tanto, el conflicto sigue activo, con informes de que Rusia ha derribado drones ucranianos en la región de Boroneev. La Casa Blanca está considerando invitar a Zelensky a la reunión, aunque fuentes diplomáticas indican que su presencia es incierta. La OTAN también está monitoreando de cerca las negociaciones, enfatizando la importancia de un enfoque conjunto.

El viernes se perfila como un día decisivo. La comunidad internacional observa con atención, temiendo que un mal acuerdo pueda allanar el camino hacia un conflicto más amplio. La historia nos enseña que ceder ante la agresión puede tener consecuencias devastadoras, y Europa está decidida a no repetir los errores del pasado.